Dentro de la práctica de la cosmética, hay una actividad que simboliza todo lo que significa el mantener la salud superficial en un buen estado, con el uso de diversos productos, conocida como rutinas de cuidado facial. Dentro de dichos rituales de belleza, se pueden aplicar sustancias y tratamientos destinados específicamente para el cutis, como se le conoce al rostro dentro de esta rama de estudios de la estética convencional.
La finalidad de las rutinas es mantener el cutis hermoso y sano, principalmente gracias a los productos enfocados en la piel, destinados a mantener su firmeza, elasticidad, tonicidad, resistencia y suavidad. Sin embargo, la dermis no es el único objetivo claro de los implementos estéticos más particulares, ya que el vello facial también juega un papel fundamental dentro de la correcta imagen del rostro.
No se trata de la barba o el bigote masculino, tampoco de esos vellitos que afectan a algunas mujeres y que intentan eliminar de forma definitiva, sino de unos que, sea como sea, merecen ser cuidados y mantenidos. Conocidos como pestañas, estos singulares vellos se encuentran en los bordes de los párpados, cumpliendo una función crucial al mantener las impurezas ambientales fuera de los órganos oculares.
En la actualidad, se consideran uno de los símbolos estéticos del rostro más populares, al realzar la belleza de los ojos, dar un enfoque distintivo a la mirada y generar atención en la parte alta del cutis. Se pueden embellecer para desviar la atención de algunas imperfecciones, como las patas de gallo, por lo que se deben cuidar atentamente e incluso aumentar su volumen, con alguno de estos Métodos para obtener unas pestañas largas y más espesas
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Trucos simples para cuidar de estos vellos
Generalmente, los especialistas tienen un enfoque común en el uso de los cosméticos ya conocidos, pero no niegan el hecho de que muchas personas prefieren alternativas fuera de la lista más común. La cosmética naturista es una de las más solicitadas, al hacer énfasis en el uso de agentes puros y naturales, que no se vean afectados por ingredientes químicos, como el alcohol, que pueden ser irritantes o alérgenos.
Sin embargo, hay muchos consejos cotidianos que se pueden aplicar, fuera de los cosméticos o las sustancias naturales, que se aplican con la finalidad de obtener una ventaja o beneficio a través de la absorción. Un claro ejemplo es el hecho de que, como vellos delicados que son, las pestañas deben tratarse con sumo cuidado, evitando jalar, aplicar presión o realizar movimientos que causen daños.
Para la aplicación de cualquier pestañina, cosmético, maquillaje u otro tipo de sustancias, se debe utilizar un cepillo especial para estos vellos, con cerdas largas y relativamente suaves que ayudan a no enredarlas. La forma que tienen estos cepillos está diseñada para que ayuden a mantener la dirección natural de los vellos, llegando prácticamente a la raíz de los mismos y tratando con delicadeza hasta las puntas.
Tampoco debemos olvidar el valor que tienen muchos elementos sintetizados, como la vaselina y otros ingredientes menos comunes en la cosmética, que demuestran sus valoren medicinales. Si una sustancia posee propiedades y principios activos beneficiosos para las pestañas, sin grandes riesgos ni posibles complicaciones posteriores, no hay razón para no darle una oportunidad y utilizarlos.
Vaselina
Cuando no se quiere utilizar maquillaje convencional, pero aún así se requiere de algún elemento para resaltar, dar forma, ayudar a rizar y dar brillo, la vaselina es sin duda el compuesto ideal. Su textura y densidad son apropiadas para ser aplicada en estos vellos, además de que se considera un excelente hidratante, que los mantiene aislados de impurezas, suciedad, elementos externos e incluso de parte de los efectos de los rayos UV.
Aceites y óleos vegetales
Ya se ha mencionado el valor que tienen óleos como el aceite de ricino, considerado como uno de los aliados naturales más populares para tratar las pestañas, pero hay otros con propiedades similares, los aceites de oliva, de coco, de jojoba, de almendras y el óleo esencial de manzanilla, son increíbles para aportar brillo y volumen, además de que, a largo plazo, estimulan el crecimiento, como se explica en La función del aceite de ricino para alargar las pestañas
Extracto de semillas de calabaza
Un concepto bastante común dentro de la cosmética es la uniformidad, que describe un estado de balance en la forma, tonalidad e imagen estética de un elemento de nuestro cutis, la piel o del cuerpo. El extracto de estas semillas es capaz de dar equilibrio al sistema folículos de las pestañas, mientras mejora su apariencia, no solo a largo plazo, sino de manera inmediata, al aportar brillo, rizar y mantener la dirección de las fibras capilares.
La protección para evitar daños futuros
Mientras muchas personas aseguran que lo más importante para cuidar cualquier tejido, incluso el capilar, como el cabello y las pestañas, es la limpieza, otros afirman que se debe evitar cualquier daño. Esto cobra un gran sentido al comprender que existen muchos factores externos capaces de afectar de forma negativa a los folículos pilosos, la razón del pelo e incluso su extensión, sin importar si se encuentran en los párpados.
Además, hay que tener en cuenta que la función de estas, como parte del organismo en su totalidad, es proteger los ojos de cualquier elemento externo que pueda ingresar en estos órganos esenciales. Por ejemplo, si una persona va caminando por la calle, las gotas de agua, el rocío, las partículas de polvo y de humo, así como el polen y otros elementos que pueden caer dentro de los ojos, serán atrapados por las pestañas superiores.
A causa de esto, con el paso de las horas, en ellas se van acumulando una gran cantidad de impurezas, que no solo afectan al interactuar con su superficie, sino que también es pedo añadido a su estructura. No debemos olvidar que se trata de vellos delicados, que suelen perder su resistencia ante la presión, especialmente cuando con largos y delgados, o cuando deben soportar más peso del que posee su estructura propia.
Del mismo modo, el tono y la fortaleza de estas va decayendo a causa de uno de los enemigos más comunes de la estética y de nuestro cuerpo, que pasa desapercibido por ser natural e increíblemente vital. El sol emana en todo momento una radiación que, a pesar de no ser nociva al organismo, va causando estragos cuando la exposición se vuelve demasiado cotidiana y prolongada.
Se trata de los rayos ultravioleta, conocidos por sus siglas UVA o UVB, de acuerdo a la clasificación de las consecuencias que dejan al contacto con la dermis, que pueden ser huellas internas o externas. La piel se puede ver afectada por las molestas e incluso dolorosas quemaduras solares, la melanina se va degradando al funcionar cómo filtro solar natural, mientras que la dermis se ve alterada por esta radiación.
El pelo y las pestañas, por su parte, van perdiendo nutrientes esenciales que ayudan a mantener su fortaleza, su resistencia y la adhesión de las raíces a los folículos capilares a los que se encuentras unidos. Además de esto, se va reduciendo la tonalidad natural, haciendo que algunos vellos se vean más claros con el tiempo, lo que resta volumen y da una sensación de reducción de su longitud y espesor.
De todo esto se deben proteger, por lo que el uso del rimel es más que una forma de embellecer, dar volumen y cuerpo, así como se aportar diversas propiedades, si se utiliza el maquillaje con nutrientes. Otros cosméticos pueden aumentar la salud de estos vellos, lo que a ciencia cierta se considera una forma de protegerlos de la causa, la falta de resistencia y la mayoría de los elementos externos.
Los riesgos del uso incorrecto del maquillaje
A pesar de que las pestañas son básicamente parte del vello facial, se encuentran adheridas a uno de los pliegues de piel más delicados del cuerpo, por no decir el que más, ya que posee unas características peculiares. Los párpados son indudablemente delgados, sensibles y frágiles, al igual que el resto del contorno de ojos, cuya longitud tiene menos de 0,5 mm de grosor aproximadamente.
Por suerte, los folículos donde se encuentran las raíces de estos vellos tienes una profundidad mayor, al ingresar en los párpados de manera vertical, en vez de la forma horizontal convencional del resto de los capilares. Esto le da a las raíces un extra de espacio, por lo que son bastante firmes y resistentes, pero aún así deben soportar el peso de todas las impurezas y agentes externos que no ingresan en los ojos.
Se puede considerar que las pestañas son exageradamente livianas, ya que es bastante difícil calcular el peso de algo como un pelo corto, pero esto solo significa que cualquier extra de p so añadido afecta más. Lo anterior cuenta pata el caso de sustancias como el rimel, máscara o pestañina, una sustancia utilizada para dar volumen, simulando unos vellos más largos y gruesos, lo que agrega espesor a esta zona.
Es común que un punto que cubre los ojos, dentro del campo de la estética, requiera destacar de cierto modo, ya que la mirada en sí misma es una fuente de atención en la que nos enfocamos cuando nos comunicamos. Aún así, hay dos errores básicos que se pueden cometer con este tipo de maquillaje, capaces de afectar a largo plazo el rendimiento de la estructura capilar de los párpados.
El uso de una cantidad excesiva de maquillaje, en primer lugar, significa un mayor peso añadido a cada folículo capilar, que va perdiendo resistencia con el paso del tiempo, lo que lo hace cada vez más vulnerable. La caída de una pestaña es algo bastante común, pero el organismo debe tener una condición óptima para el crecimiento regular de los nuevos vellos faciales, lo mismo que ocurre con todo el pelo del cuerpo.
Aún así, la importancia de estos pelos se puede considerar como mayor, al proteger un órgano tan importante como es el ocular, pero esto no significa que el cuerpo se adapte a los valores considerados predeterminados. Por eso el uso de demasiada pestañina, como en el caso de añadir varias capas para que estas se vean más agradables estéticamente, puede repercutir en el futuro, ya que estas se vuelven más delgadas y frágiles.
Luego está el hecho de no remover el maquillaje de forma regular, o hacerlo de un modo incorrecto, aplicando una cantidad de presión innecesaria, que causa una propensión a la caída de los vellos en cuestión. Se debe realizar el desmaquillando cada noche, siempre que se ha utilizado el embellecedor durante el día, para evitar obstrucciones en los poros, pero también en los folículos capilares.
Aún cuando el maquillaje se elabora de materiales amigables con el cuerpo, se trata de sustancias ajenas al organismo y su naturaleza, lo que significa un elemento externo que no se supone que forma parte de su sistema. Cuando el maquillaje aún está húmedo, es propenso a atraer otras impurezas como el polvo, lo que hace que el peso aumente, elevando el esfuerzo de los folículos al sostener las pestañas.
De esta forma, luego de los cuidados básicos que se realizan durante las rutinas faciales, el desmaquillando cotidiano y el uso correcto del maquillaje, representan medidas apropiadas para cuidar de estos vellos. No hay que olvidar que escoger los productos adecuados también es un truco de belleza que puede causar efectos positivos en la salud de la piel, ya que hay maquillajes y limpiadores que ofrecen ventajas y propiedades, como nutrientes esenciales para la dermis.
El uso de cosméticos para el cuidado general
No solo se pueden aportar distintos activos durante el proceso de maquillado, o con el uso de limpiadores y desmaquillantes para las pestañas y el área circundante, sino a través de otros cosméticos variados. La mayoría de las marcas de producción estética, poseen productos diseñados para ser aplicados en esta zona, los párpados, pero también en los vellos, como en el caso del mismo rimel o pestañina.
Uno de los implementos más conocidos es la máscara protectora para las pestañas, una sustancia que se aplica al principio del proceso de maquillado, antes del rimel, para cubrir los pelitos de forma independiente. La mayor ventaja que otorga este cosmético es que protege de las inclemencias de los rayos ultravioleta, capaces de alterar como ya se ha mencionado, reduciendo la resistencia y decolorando de forma poco uniforme.
También existen los llamados tratamientos para las pestañas, sustancias que funcionan como el champú para la reparación capilar, en el caso del cabello, ayudando a regenerar los daños en toda su longitud. No solo estimula la regeneración de las pestañas en toda su extensión, sino que además repara la vulnerabilidad de las raíces de los folículos pilosos, haciendo que se fortalezcan y aumentando la resistencia a la caída de los vellos.
El MDN es otro ejemplo, con un efecto vasodilatador que actúa sobre el folículo piloso y la raíz, ayudando a alargar las pestañas durante la fase de crecimiento, para que crezcan más largas, espesas, tupidas y fuertes. Un activo potente, que eficaz y seguro es el Complejo biokeratin, que aplica las bondades de la biotina para fortalecer, mientras que estimula de forma intensa el crecimiento y el surgimiento de nuevos pelitos en los párpados.
Otros agentes cosméticos que funcionan en esta zona son el Pantenol, el Aceite de ricino, el Trébol rojo, los Péptidos el Aceite de jojoba y el Extracto de morus alba, todos estimulantes del crecimiento folicular. El ácido hialurónico se aplica para hidratar, al igual que la Alantoina y si efecto calmante y humectante, similar al uso de las vitaminas encapsuladas, altamente recomendadas por su efecto protector, fortalecedor y antioxidante.
La mayoría de estos productos cosméticos se pueden aplicar durante la rutina de cuidado diurna, al menos media hora antes del uso del maquillaje, para que se sequen y sus propiedades se absorban. Aún así, se recomienda sobre todo utilizarlos en las horas de la noche, durante la rutina nocturna, para que actúen en el tiempo que dormimos y descansamos, cuidando y protegiendo de forma prolongada.
El cuidado del contorno de ojos
Cada parte de nuestro organismo, si se mira como una porción de un todo, posee un sistema propio, con elementos de funcionalidad que, aún cuando no se conocen del todo, tienen una finalidad innegable. Por ejemplo, el cuero cabelludo absorbe los nutrientes y las propiedades que se requieren para la salud del cabello, por lo que el champú y otros cosméticos están diseñados para limpiar esta zona de forma correcta.
Las pestañas y los folículos capilares desde los que nace su raíz, forman parte del sistema de contorno de ojos, por lo que la transpiración y el sebo que se liberan de sus poros, afectan directamente a los vellitos. Esto ocurre también con cualquier sustancia que llega, además de aquellas que salen, como los nutrientes, la humectación y las necesidades básicas que tiene cualquier zona de la piel.
El cuidado del contorno de ojos, como ventaja extra, además de reducir las imperfecciones como patas de gallo u ojeras, fortalece las pestañas, los folículos capilares y las raíces que las mantienen en su lugar. Como cualquier otro pliegue de piel, se debe realizar un proceso minucioso dentro de la rutina de cuidado, utilizando cremas humectantes, tónicos, sérum y cualquier producto que aporte algún beneficio.
El principal dentro de la cosmética, es una sustancia cremosa que recibe el mismo nombre de la zona a tratar, contorno de ojos, lo que remarca la importancia de su fórmula tan específica y tan particular. Este cosmético tiene la combinación ideal de propiedades y principios activos requeridos para mantener la dermis, los folículos y las pestañas fuertes, nutridos, hidratados y tonificados.